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iclotimia, molestias y cansancio conviven con vos desde hace años. Seguramente ya te acostumbraste a esos síntomas que anuncian y acompañan tu período, pero hacés mal: hoy en día es posible evitarlos, con unas medidas tan simples como efectivas. Añadir ciertos alimentos a tu dieta, realizar una actividad física o cambiar el modelo de corpiño impiden que te conviertas en una desquiciada.

¿DOLOR ABDOMINAL? NO, GRACIAS

A veces es solo una puntada en la parte baja del abdomen. Otras, el dolor dura días y te obliga a cancelar todos tus planes y a dormirte abrazada a una bolsa de agua caliente. ¿Por qué sufrís de esa manera? Los responsables de esta molestia son unos químicos llamados prostaglandinas, que ayudan a que los músculos del útero se contraigan y que expulsen su revestimiento. "Son sustancias que actúan de manera diferente en cada órgano. En el útero provocan el aumento del tono muscular y la disminución del flujo sanguíneo, lo que las hace responsables, en parte, de los dolores menstruales (también dependen de otros mediadores químicos y de otras circunstancias, como la susceptibilidad individual). Hay que tener en cuenta que la dismenorrea es uno de los componentes de algo bastante más complicado, que se denomina ?Síndrome de Tensión Premenstrual (STPM)?: seis de cada diez mujeres sufren alguna manifestación de este conjunto de síntomas", explica el ginecólogo y obstetra Alejandro Gabriel Villar, del Hospital General de Agudos Bernardino Rivadavia. Este especialista explica que el tratamiento del STPM requiere de una consulta ginecológica, en la que se deberán descartar las causas orgánicas o físicas del dolor (como los miomas uterinos, la endometriosis o una enfermedad pelviana inflamatoria), que requieren tratamientos específicos.

 

Para controlar el dolor es fundamental actuar a tiempo. "Podés tomar algún antiinflamatorio no esteroide (AINE), que reduce la producción de prostaglandinas y los síntomas en más del 80% de los casos", recomienda Villar. Mientras esperás que el medicamento haga efecto, colocá sobre tu abdomen una almohadilla eléctrica o una bolsa de agua caliente, ya que el calor alivia las contracciones musculares. Consultá con tu médico si podés tomar anticonceptivos orales: al evitar la ovulación, mejoran también la sintomatología premenstrual. "También son recomendables ciertos cambios de hábitos. Evitá el cigarrillo, las grasas, la sal, el café, los chocolates y el alcohol. Además, realizá alguna actividad física", aconseja el ginecólogo.

EVITÁ LAS CARRERAS AL BAÑO

Algunas mujeres sufren de diarreas cuando les viene el período. Y, aun sin llegar a ese extremo, normalmente la mayoría va más seguido al baño. ¿La causa? Las  prostaglandinas también contraen los músculos de los intestinos. Esto tiene un fin: "Las deposiciones ayudan a eliminar las hormonas (como el estrógeno y la progesterona) que no son necesarias para el organismo, porque ya cumplieron su función", explica la médica Elba Albertinazzi, presidente de la Asociación Argentina de Médicos Naturistas. El primer día de tu menstruación tomá un analgésico del tipo AINE, como Ibuprofeno, y volvé a hacerlo cada seis horas. Al lentificar la producción de las prostaglandinas, también se retardan las contracciones intestinales. Pero, por las dudas, en esos "días rojos" te conviene llevar en la cartera algunas pastillas de carbón, que son antidiarreicas, y evitar los alimentos con salvado. "Producen inflamación intestinal", dice Albertinazzi.

SUBE Y BAJA EMOCIONAL

Llenás de besos a tu novio cuando te dice que sos una diosa, y a los diez minutos te largás a llorar, porque lo sentís distante. No, no sos bipolar: las fluctuaciones hormonales que se producen en los primeros días del ciclo (disminuye el estrógeno y aumenta la progesterona) son las responsables de esos cambios abruptos de humor. Pero no tenés por qué ser una rehén de ellas. "Las píldoras anticonceptivas con fórmulas de 24 días de hormonas activas y cuatro de placebo son muy efectivas en los casos en los que los síntomas premenstruales son muy intensos: al prolongar en el tiempo el efecto de las hormonas, disminuyen las molestias ocasionadas por la falta de las mismas", asegura la ginecóloga y sexóloga clínica Karina Iza, del Centro de Salud y Acción Social (SeSAC) Nº 12 del Hospital Hospital General de Agudos Dr. Ignacio Pirovano.

Un remedio natural rápido y efectivo: sumá más lácteos a tu dieta. La dosis de calcio diaria recomendada cuando estás con el período es de, al menos, 1 gramo diario. Eso significa de tres a cuatro porciones de leche, queso o yogur. "También es muy aconsejable comer un huevo cada día, ya que, además de vitamina D (que ayuda a reducir los cambios de humor), aporta otros nutrientes, como la colina y el inositol, que estimulan la eliminación de las hormonas. Además, contiene hierro (la pérdida de sangre puede reducir los niveles de este mineral en el organismo), magnesio y calcio, que evitan los cólicos uterinos", dice Albertinazzi.

Ir al gym también te ayuda a luchar contra los cambios abruptos de humor. "El ejercicio físico aumenta la producción de endorfinas, la llamada ?hormona de la felicidad?. Conviene practicar rutinas de estiramiento, como el yoga", recomienda la médica naturista.